Trasnos, trasgus, duendes, silfos (cuentito humorístico puesto en escena por Elena con su arpa)

Cuenta la Leyenda que un hombre rico recibió como premio de un trasgo (también llamado trasno, trasgu, duende, kobold, gremlin, silfo, goblin o gnomo) la posibilidad de pedir lo que quisiera pero con la condición de que su vecino (un pobre linyera) recibiera el doble. Él, el rico millonario, primero se alegró. Y al segundo, comprendió que era una trampa. Si pedía una gran fortuna, el linyera pasaría a tener 2 grandes fortunas; superándolo en riqueza y don de gentes (porque poderoso caballero es Don Dinero). Entonces, sabiamente para la inteligencia propia de su clase, pidió que le quitaran un ojo, una pierna, un brazo y que le cortaran la... (total, él no la usaba). Ahí, fue cuando el trasgo (el pequeño pitufo propio de la mitología clásica del norte de España) se dio cuenta de su error. Le había ofrecido un regalo a un votante de la Derecha Cínica, Sádica, Cipaya, Tilinga y Entreguista. Entonces, borró con la
Back to Top