Entrevista a Ricardo Mollo (UTPBA, 1992)

A mediados y finales de los ochenta, nuestro amigo productor y gestor cultural Gabi Patrono estudiaba batería en la Escuela de Música y Artes de David Lebón sobre la calle Gascón. Ahí conoció a Ricardo Fragoso, que era profe de batería, y se hicieron muy amigos. Ricardo lo invitó a participar de unos talleres de Historia del Rock que dictaba junto al músico Alberto Cedrola en La Casa de Juventud, en los lagos de Palermo. Al compartir esa experiencia juntos se incrementó la unión entre ellos y comenzó una cultura ritual de reunirse para escuchar discos, comentarlos, compartirlos, y también acercar invitados a la ronda. Ritual que duró muchísimos años. En 1992 se volvieron a dar los talleres de rock esta vez el marco institucional de la UTPBA (Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires), en Alsina y Piedras, pleno centro porteño. En esta etapa Gabi fue invitado a participar de la coordinación junto a Ricardo y Alberto, y se adaptó la propuesta al formato de Reportajes Públicos para acercar las experiencias directas de los artistas a quienes participaran. Nos comparte Gabi: “Al principio me encargué de contactar a los músicos, convocarlos, pasarlos a buscar, llevarlos y traerlos, sacar fotos en entrevistas y cuidar los detalles de producción para que todo salga bien. A medida que pasó el tiempo, me senté en la mesa junto a Alberto y Ricardo, que realizaban las entrevistas, y entrevisté con ellos. Me di el lujo de contactar a mucha gente que apreciaba y valoraba. En un momento, por ejemplo, la llevamos a Gabriela y a Pino Marrone. Pasaron Litto Nebbia, Hugo González Neira, Oscar Moro, María Rosa Yorio, Claudia Puyó, Daniel Melingo, Moris, Los Violadores, Antonio Birabent, Lalo de los Santos, Rubén Goldín, Adrián Abonizio, Bocón Frascino y muchos más de la escena joven como Suarez, La Portuaria y Dos Minutos. El primer año tuvimos la visita de Ricardo Mollo. Yo lo conocía por ser cliente la casa de música que tenía en Ramos Mejía, la administraba creo que junto al Piojo Ávalos. Se llamaba “Frankie Pig“ y quedaba a metros de la estación. Todos los que éramos músicos de la zona siempre íbamos a comprar algo o a ver qué instrumentos había, o simplemente pasar para ver quién estaba y pasar a saludar. Algún día entré, lo encontré a Ricardo y le comenté de los reportajes públicos. Él me dio el teléfono de su casa. Me costó coordinar porque siempre le dejaba mensajes en el constestador y nunca lograba hablar con el, hasta que me respondió y quedamos. Lo pasamos a buscar con Alberto Cedrola en auto y compartimos un viaje en el que pusimos en común a mucho amigos e historias del Oeste. Su papá tenía una fábrica de zapatos y mi viejo, una de medias, así que le comenté que nuestros viejos se conocían, que varias veces habían charlado de sus hijos músicos, que estaban el rock. También que yo había ido a varios conciertos de la última etapa de Sumo y la primera de Divididos, así que fuimos conversando sobre eso. Le conté de cuando tocaron en el estadio de Vélez para el Festival de la Rock and Pop, que lo había visto a Luca en la puerta, caminando y descalzo. Ellos se reían. También conversamos de cuando ellos actuaron presentando “40 dibujos ahí en el piso“ en City Pop de Ramos, que era un local chiquito. Recordamos también de un recital en el que tocaron “Leave me alone“ de Lou Reed, mientras se bajaban al público uno a uno, y eran reemplazados por sus plomos. Ese viaje en auto pasó hace casi treinta años y tengo un recuerdo brumoso. Cuando llegamos al reportaje, él estaba súper cordial, súper amable. La charla duró como dos horas. Después se quedó para charlar con la gente, sacarse fotos con todo el mundo, firmar fotos, libros. Y a la vuelta, como volvíamos todos juntos para Ramos de nuevo, pasamos por una pizzería de Flores sobre la calle Varela, que estaba cerrando, pero nos hizo la gamba igual. Así que la única mesa servida fuimos nosotros, que seguimos charlando y contando anécdotas hasta cualquier hora, mientras los mozos barrían, baldeaban los baños, apagaban las luces. Fue una tarde muy animada, muy divertida. Así fue esa época“. Reportaje: Alberto Cedrola, Gabriel Patrono y Ricardo Fragoso Fotografías: Gabriel Patrono Digitalización de fotos: Giuliana Trucco Digitalización y restauración de audio: Divagario ☼ Si compartís, nos ayudás muchísimo a difundir estas obras Si te suscribís, vas a recibir novedades cada vez que subamos material nuevo